Desde pequeña, Jenni siempre se ha inclinado por el dibujo y la lectura de libros ilustrados. Le encantaba imaginar mundos y personajes, y plasmarlos en el papel. A medida que crecía, se dio cuenta de que ser ilustradora era una opción viable, por lo que se especializó en esta área. 

El dinamismo de los personajes, el uso del color y la temática de sus ilustraciones son lo que la diferencian de otros ilustradores. Además, la ilustradora ha destacado que le encanta ilustrar a las personas, capturar su esencia, movimiento y lo que están haciendo. La temática que utiliza en sus ilustraciones es muy personal, le gusta hacer temas relacionados con la naturaleza, las mujeres y los animales, lo que se traduce en imágenes llenas de vida y dinamismo.

Jenni ha trabajado en distintos proyectos de ilustración, desde libros hasta videojuegos, y ha destacado que aunque el enfoque creativo es parecido en esencia, en cada tipo de proyecto se prioriza algo diferente. «Cuando estoy haciendo videojuegos, priorizo el uso del color, las formas, el diseño, la técnica para hacer toda la interfaz, algo más tecnológico. Sin embargo, cuando estoy haciendo un libro ilustrado, priorizo el storytelling, qué quiero contar, qué colores voy a usar para reforzar la historia», ha explicado.

Taller de dibujo rápido en el Centro Botín

Jenni ha destacado que no es la primera vez que tiene la oportunidad de ofrecer un taller o participar en actividades del Centro Botín. Sin embargo, en esta ocasión se ha mostrado entusiasmada por la diversidad de los participantes en el taller, que incluían niños con sus madres, adolescentes, adultos mayores, dibujantes y no dibujantes. «Todos tenemos algo que aportar», ha mencionado.

Por otro lado, la ilustradora ha notado que muchos de los participantes eran demasiado críticos con su trabajo y no se permitían disfrutar del proceso creativo. Es por ello que ha hecho hincapié en la importancia de capturar momentos en lugar de buscar la perfección en el dibujo. Según la artista, la sociedad está obsesionada con la perfección, lo que no siempre lleva a un resultado satisfactorio. Por el contrario, Jenni cree que es importante confiar en el proceso y permitirse crear a partir de lo que se siente y se ve.

Finalmente, ha añadido que siempre le gusta citar a un ilustrador al que le preguntó cuándo había comenzado a dibujar y él citó a otro que decía «la cosa no es cuando tú empiezas a dibujar, sino cuando el resto de gente para de dibujar». De acuerdo con Jenni, de pequeños es normal que todo el mundo siempre dibuje. Al final cada uno se va por su rama, pues su caso siempre siguió en la misma hasta el día de hoy.